La
obra de Yoram Kaufmann nos enseña cómo reconocer el significado
objetivo de las imágenes que la psique utiliza para captar nuestra
atención y dirigirla hacia lo que es necesario atender para poder
restablecer el equilibrio que se perdió con un desarrollo unilateral de las facultades humanas, endémico en las sociedades modernas. El Dr. Kaufmann nos enseña cómo traducir lo que las
imágenes expresan a un lenguaje que la mente racional puede entender.
También nos explica en qué el traducir el significado de las imágenes es
diferente de interpretarlas. La traducción es informada por las
cualidades esenciales expresadas en la imagen que nos orientan y nos
muestran el camino hacia una mayor complejidad y diversidad en la
conducta, en consonancia con el entorno físico y psicosocial, hacia una
vida más plena, hacia más libertad de movimiento y capacidad de
respuesta. La interpretación, en cambio, tiende a surgir de la
reactividad de los complejos como parte de los mecanismos de defensa
contra aquello que, en principio, necesitaría ser atendido.
Momento a momento, una inconmensurable cantidad de impresiones sensoriales tienen lugar en el cuerpo, relativas a los procesos internos y a nuestra relación con el entorno. Si es preciso, porque algo requiere una intervención, la psique humana las manifiesta en forma de sensaciones, sentimientos, estados emocionales y anímicos, sueños, ensoñaciones, fantasías, símbolos, síntomas, actos fallidos… imágenes que llegan a la consciencia en un intento de llamar nuestra atención. Dr. Kaufmann explica que para reconocer lo esencial de una imagen es importante verla en su contexto. En relación con las coordenadas del campo gravitatorio de la Tierra, también las formas del cuerpo, del movimiento y del comportamiento constituyen una especie de imagen. Para llegar a una comprensión orgánica de cada cosa en relación con el contexto en el que aparece y para poder gestionar el flujo de las impresiones sensoriales sin quedarnos desbordados, reconocer esas imágenes es de gran utilidad porque pueden orientarnos e informarnos sobre los asuntos que necesitan ser atendidas.
La espada del discernimiento propia del pensamiento racional que los humanos forjamos en el transcurso de la historia del desarrollo de la consciencia es imprescindible para llegar a comprender la compleja información sensorial que, en gran medida, se expresa en forma de imágenes. Pero es importante saber usar esta herramienta incisiva adecuadamente. Usarla para diseccionar la naturaleza sin tener en cuenta el conjunto, para dominarla y para explotarla en beneficio propio, no puede llevar a buen puerto porque toma como punto de partida la suposición de que los humanos estamos por encima de la naturaleza, separados de ella. Si el poder incisivo del pensamiento racional se usa para relegar las facultades receptivas propias de la percepción sensorial a un segundo plano, una gran parte de la información que nos permite orientarnos en el mundo al cual pertenecemos como parte integrante queda por debajo del umbral de la consciencia.
Con sus antecedentes científicos como físico y como analista junguiano, en su libro La vía de la imagen, el Dr. Kaufmann muestra la importancia de elevar las expresiones de la psique por encima de este umbral, y sabe describir los medios para hacerlo, de un modo comprensible tanto para la mente incisiva como para la receptiva. En el contexto del cambio climático, de las pandemias y de las manifestaciones no integradas del trauma multigeneracional individual y colectivo que precipitan el mundo actual a una de sus mayores crisis, La vía de la imagen nos proporciona medios eficaces para crear caminos que nos permiten salir del atolladero.
Entre 2008 y 2012 Annie B. Duggan y yo viajábamos regularmente, Annie desde Seattle y yo desde Barcelona, para reunirnos a medio camino en el Assisi Institute for the Study of Archetypal Pattern Analysis en Brattleboro, Vermont. Queríamos formular una serie de aspectos del trabajo de Reconocimiento de Patrones Somáticos que Annie había creado junto con Janie French, el Duggan/French Approach (DFA), una vez que habíamos logrado resituarnos tras el fallecimiento de Janie.
Lamento no haber llegado a tiempo para tener el placer de conocer a Yoram Kaufmann personalmente. No obstante, la presencia de su obra en el Assisi Institute fue un factor decisivo para que desde el primer día me sintiera completamente en mi casa allí. De niña traducía lo que mi padre decía para que mi madre lo entendiera, y viceversa. En la universidad estudié ciencias lingüísticas aplicadas y, al iniciar mi vida profesional, me establecí como traductora autónoma. Cuando más tarde me titulé como practicante de DFA Reconocimiento de Patrones Somáticos, un amigo me preguntó por qué había cambiado de carrera y le dije que seguía siendo traductora, simplemente había ampliado el terreno de aplicación. En vez de traducir un idioma a otro, como practicante de DFA me dedico a traducir lo que el cuerpo y la psique expresan a un lenguaje que la mente consciente puede entender. La obra de Yoram Kaufmann me permite profundizar en este empeñó, perfeccionarlo y alcanzar un grado más elevado de especificidad.
Por todo esto me siento muy agradecida. Es un gran placer, privilegio y honor para mí poder aplicar mis facultades para dar su obra a conocer al mundo castellanoparlante.
Dentro de poco podrás encargarlo en papel o versión digital en www.documentauniversitaria.com o venir a ermie para adquirir un ejemplar en papel.
Barcelona, 18 de diciembre de 2020
Brigitte Hansmann
Practicante de DFA Reconocimiento del Patrones Somáticos
Analista de Patrones Arquetípicos y autora de
Con los pies en el suelo y Respirar con árboles
www.dfa-europa.com