sábado, 25 de noviembre de 2017

En suport al legítim govern de Catalunya

para castellanohablantes más abajo

Benvolguts Srs. President, Vicepresident, Consellers, Conselleres del legítim govern de Catalunya a l’exili i a la presó!

Vosaltres encarneu la base institucional per la creació de la nova república. Veu crear el marc legal per constituir-la. Moltíssimes gràcies per la vostra valentia i dedicació!


El poble ha posat de manifest l’espasa de llum de la consciència i del discerniment. Aquesta espasa penetra a les entranyes de la humanitat i fecunda la llavor de llibertat que tothom hi porta. No sé quina durada té la gestació d’una república. Però sent humana, crec, s’haurà de comptar amb un mínim de nou mesos.

Volem que podeu estar lliures, sense càrrecs, per treballar plegats i tenir cura d’aquest procés orgànic de gestació d’una nova forma de convivència amb respecte i dignitat per tothom.

Mentre l’estat espanyol s’entesta en retratar la seva cara feixista a la vista del món sencer, tenint-vos presos i a l’exili, si us plau, teniu cura de la vostra salut: descanseu, feu exercici, mantingueu-vos ben hidratats, llegiu, escriviu, somieu...

No sé què podem fer per aconseguir la vostra llibertat ja, però sí sé, que qualsevol cosa que es fa per lluitar contra el mal, només li dona energia, tal com ensenya una antiga saviesa; si no l’alimentem amb la nostra energia, el mal es consumirà a ell mateix. Mentre, lo indicat és enfocar la pròpia energia en un vigorós progrés en el be.

Un vigorós progrés en el be, per mi, vol dir treballar plegats, vol dir idear i crear les estructures de la mena de república en la que volem viure.

Des del fons més profund del meu cor: gràcies! I visca la terra!

Brigitte Hansmann
www.dfa-europa.com


Queridos Sres. President, Vicepresident, Consellers, Conselleres del legítimo gobierno de Cataluña en  el exilio y en prisión!

Vosotros encarnéis  la base institucional para la creación de la nueva república. Creasteis el marco legal para constituirla. ¡Muchísimas gracias por vuestra valentía y dedicación!


El pueblo ha puesto de manifiesto la espada de luz de la conciencia y del discernimiento. Esta espada penetra las entrañas de la humanidad y fecunda la semilla de libertad que todo el mundo lleva en su interior. No sé qué dura la gestación de una república, pero siendo humana, creo, habrá que contar con un mínimo de nueve meses.

Queremos que estéis en libertad, sin cargos, para trabajar juntos y cuidar este proceso orgánico de gestación de una nueva forma de convivencia con respeto y dignidad para todos.

Mientras el estado español se obceca en retratar su cara fascista a la vista del mundo entero, teniéndoos presos y en el exilio, por favor, cuidad vuestra salud: descansad, haced ejercicio, manteneos bien hidratados, leed, escribid, soñad…

No sé qué podemos hacer para conseguir vuestra libertad ya, pero sí sé que cualquier cosa que se haga para luchar contra el mal, sólo le da energía, tal como enseña una antigua sabiduría; si no lo alimentamos con nuestra energía, el mal se consumirá a sí mismo. Mientras tanto, lo indicado es enfocar la propia energía en un vigoroso progreso en el bien.

Un vigoroso progreso en el bien, para mí, quiere decir trabajar juntos, quiere decir idear y crear las estructuras de la clase de república en la que queremos vivir.
 
Desde el fondo más profundo de mi corazón: gracias!
I visca la terra!

Brigitte Hansmann
www.dfa-europa.com

domingo, 5 de noviembre de 2017

Comunicación inconsciente: El cuerpo no miente

El campo comunicativo



Todo acto de comunicación consiste en emisor, receptor y mensaje. Entre emisor y receptor se constela un campo interactivo que el analista estadounidense Robert Langs llama campo comunicativo. En un diálogo o una tertulia, todas las partes son emisores y receptores de forma intermitente. En un discurso, ya sea de un presidente, de un conferenciante o una persona cualquiera, hay un emisor y muchos receptores. En todo caso, el campo comunicativo se caracteriza por las propiedades inherentes a la función de la comunicación, en principio, la de crear entendimiento, compartir conocimiento o celebrar la convivencia, aunque existen casos en los que deliberadamente se utilizan mensajes para confundir y destruir la comunicación, la comprensión y la convivencia.

Sobre la base de su experiencia clínica, Dr. Langs ha dedicado una gran parte de su extensa carrera profesional al estudio de las dinámicas que tienen lugar en ese campo comunicativo, a fin de facilitar el entendimiento mutuo y de evitar la confusión y los conflictos entre personas y colectivos humanos generados por los contenidos inconscientes presentes en numerosas comunicaciones. Con esta intención desarrolló un método sencillo y altamente eficaz para descifrar el significado de las comunicaciones inconscientes en la vida de cada día.

Dos tipos de mensaje
Los mensajes simples no significan más que lo dicho y, normalmente, se limitan a fines utilitarios. Pero con frecuencia se transmiten mensajes más complejos con múltiples niveles de significado, un mensaje simple en la superficie y otro/s codificado/s que pasa/n desapercibido/s si no se conoce el contexto. Para llegar a identificar y comprender los niveles subyacentes de significado, es indispensable conocer el contexto del mensaje, del emisor y del receptor, y también del lugar y del momento concretos en el que es comunicado, y de su motivación. Con frecuencia codificamos contenidos, sin tener conciencia de ello, porque nos cuesta enfrentar directamente la carga emocional relacionada con ellos. Hasta cierto punto, esa vía indirecta nos ayuda a adaptarnos, pero las mismas defensas que protegen la integridad psíquica frente a contenidos que se experimentan como amenazantes, pueden desembocar en locura e incapacidad de comunicar de forma verídica.

Independientemente de si tienen conciencia de ello o no, los participantes en el campo comunicativo detectan posibles contenidos ocultos más allá de las palabras y los significados comunicados conscientemente y responden o reaccionan de forma correspondiente. Muchos conflictos y malentendidos tienen su origen en ese ámbito inconsciente de la comunicación y podrían resolverse si se supiera cómo descodificar los mensajes ocultos. Para ello es imprescindible ponerlos en relación con el estímulo que los ha desencadenado, con el contexto en el que tienen su origen.

En su discurso en el senado de España, el 26 de octubre 2017, la vicepresidente de España, Soraya Sáenz Santamaría, nos da un excelente ejemplo de un mensaje de superficie con otro significado subyacente, muy distinto: afirma que la aplicación del artículo 155 de la constitución española garantiza la restauración del orden público y devuelve la tranquilidad a todos los catalanes. Lo dice con un fuerte énfasis en el “todos”. El mensaje de superficie es simple y claro; pone de manifiesto la benévola intención de la vicepresidenta y del gobierno que representa. Pero si se tiene en cuenta el contexto de esta frase - este artículo daría al gobierno español el derecho de cesar el gobierno autónomo de Cataluña y de intervenir las instituciones catalanas-, pone de relieve el origen del conflicto hispano-catalán: para un amplio sector de la sociedad catalana las pretensiones del gobierno español resultan ofensivos y prometen todo menos tranquilidad. Mientras en la superficie pretende ofrecer tranquilidad a todos los catalanes, el significado oculto niega la existencia de millones de personas.

Cabe preguntarse en qué medida el significado oculto expresado en esa frase de su discurso es inconsciente. Podría ser parte de una estrategia calculada para provocar una reacción violenta que de cara a la galería justificaría la aplicación de ese artículo que, en sí, es injustificable, si no fuera por una burda manipulación de la constitución y del estado de derecho. No obstante, la discrepancia entre el significado de superficie y el oculto puede perfectamente ser atribuible a la ingeniosa capacidad de la mente humana de apartar de la conciencia los contenidos que por una u otra razón resultan intolerables. Los síntomas del estrés postraumático y de la culpa no reconocida son ejemplos clásicos que llevan a personas inteligentes y sensibles a negar actitudes y comportamientos que resultan evidentes e innegables desde un punto de vista que permite examinar la situación con una perspectiva más amplia.

El cuerpo y la voz
Esta observadora internacional autonombrada del conflicto hispano-catalán, en el campo profesional, se ha especializado en el reconocimiento de patrones somáticos, es decir, ayuda a las personas a tomar conciencia de su forma de ocupar el espacio y de moverse en el mundo, de la tensión habitual que mantiene esa forma, y de las actitudes que esa forma expresa. De este modo, con frecuencia se llegan a comprender contenidos inconscientes que desde el punto de vista del yo consciente resultan amenazantes, porque ponen en entredicho el estatus quo de la visión de uno mismo, del mundo y de lo que la persona siente que la vida le puede deparar. No obstante, una vez reconocidas las circunstancias concretas que cargaron las condiciones iniciales de la vida de una persona del significado que esta llegó a tomar como una realidad objetiva, se descubre que este significado carece de la validez absoluto que se le había atribuido. Por doloroso que pueda resultar ese reconocimiento inicialmente, suele suponer un alivio, ya que posibilita una comunicación, conexión y relación verdaderas con los demás, que no es posible mientras el punto de vista desarrollado bajo las condiciones iniciales de la vida se considera la realidad absoluta.

Aprovechemos, pues, la oportunidad de analizar la presencia física y el sonido de la voz de la señora Sáenz Santamaría en su discurso en el senado el día 26 de octubre de 2017. Al hacer la prueba y hablar poniendo la boca como la pone ella, cuando habla, podemos hacernos una idea de qué sucede en su cuerpo. El simple gesto de los labios, tan típico de ella, afecta a todo el cuerpo. Lo primero que noto, cuando lo adopto, es cómo se acorta la musculatura de las cervicales y la zona lumbar. A su vez, ésta tira las costillas inferiores hacia dentro y limita el movimiento del diafragma, con lo cual los movimientos respiratorios quedan restringidos. El espacio a lo largo de todo el eje central del cuerpo queda encogido. La tensión de los músculos le mantiene a uno en conflicto con la dirección de la tracción de la fuerza gravitatoria, es decir, la postura está atrapada en un gesto en el que uno se separa del entorno. No es de extrañar, pues, que la señora Sáenz de Santamaría perciba la reivindicación de auto-determinación de Cataluña como separatista. La tensión mantiene la sensación directa del interior del cuerpo por debajo del umbral de la conciencia y uno no se da cuenta que, en efecto, está generando separación. Siguiendo el movimiento de la espiración, una no puede descansar hacia el centro del cuerpo debido a la estrechez del espacio central producido por el gesto de los labios que tira hacia arriba, hacia el exterior, hacia el espacio delante de la boca. Por tanto, la nueva inspiración tampoco llega a ese espacio profundo sino que se queda en la superficie, acompañada con una sensación de insatisfacción constante, porque la sensación de la conexión inherente a la naturaleza de todo ser vivo queda suspendida en la tensión de los músculos. Según el momento, la sensación de insatisfacción es más o menos difusa, pero nunca deja lugar a la profunda satisfacción de descansar en la conexión indivisible que existe entre todo ser vivo y la totalidad de cuanto existe.

Los labios son la primera parte del cuerpo con la que un bebé busca restablecer la conexión con su madre, interrumpida por el parto. El gesto de los labios de la señora Soraya Sáenz Santamaría, junto con muchas de las palabras pronunciadas por ellas, sugiere que en los primeros días o semanas de su vida sucedió algo que supuso una separación prematura de su madre, cuando su sistema nervioso todavía no estaba lo suficientemente desarrollado como para poder gestionar una separación de cierta duración. Otra posibilidad es que el contacto con su madre haya sido afectado por los registros de experiencias traumáticas o de una culpa inconsciente en el cuerpo de la madre, tal como sucede con la inmensa mayoría de personas vivas en la actualidad.

Estrés postraumático y culpa inconsciente
Pocas personas adultas hay en el mundo hoy que no sean descendientes de personas que han vivido una situación de guerra y/o de dictadura en el siglo XX, o que no hayan sido expuestas personalmente a esa clase de situación. Utilizamos la tensión de nuestros músculos para apartar de la experiencia consciente las sensaciones relacionadas con el trauma o la culpa que nos resultan intolerables, para sobreponernos, distraernos o evadirnos de una manera u otra. Hay una gran variedad de estrategias. Invariablemente, los contenidos apartados o reprimidos, se constelan como complejos autónomos de la psique, latentes en tiempos de calma. Pero en situaciones de estrés y, particularmente, bajo circunstancias que tienen cierto parecido con la situación traumática inicial, estos complejos se activan, toman posesión de la persona y eclipsan su capacidad de funcionar con cordura y juicio racional. La persona poseída no suele tener conciencia de la posesión sino que considera su conducta perfectamente razonable.

El impacto de experiencias traumáticas afecta a víctimas, perpetradores y testigos indistintamente. Mientras algunas personas logran procesar el trauma y aprender de la experiencia, muchos optan por intentar olvidarla, como si esto fuera posible. Nuestros padres y abuelos se aplicaron en dejar el pasado atrás y enfocarse hacia el futuro, probablemente porque las heridas eran demasiado profundas, el terror demasiado grande, el dolor intolerable, la culpa insondable. Pero las heridas no pueden curar sin una adecuada atención, el terror no se apacigua sin enfrentar lo que lo suscita, el dolor no se calma intentando sobreponerse, la culpa no puede eximirse con sufrimiento, fracasos y bancarrotas, no puede saldarse sin reconocerla y hacer los pasos necesarios para reparar la relación vulnerada. Las heridas, el terror, el dolor y la culpa que nuestros padres y abuelos no se vieron capaces de procesar y asimilar están presentes en nuestras vidas hoy; dan forma a nuestra manera de ocupar el espacio en el mundo y de movernos en la vida. Las formas en que se manifiestan abarcan una gran variedad: adicciones, conductas violentas y delictivas, vidas accidentadas, enfermedades degenerativas de mayor o menor envergadura, actos fallidos, una incapacidad de relacionarse de forma significativa, amorosa y solidaria con otros seres vivos, humanos y no humanos, desconocidos o de la propia familia, fracasos profesionales y personales, bancarrotas individuales y colectivas, etc.

Nuestra generación está en condiciones de hacer lo que las generaciones anteriores no fueron capaces de hacer. Una comunicación honesta puede dar la atención adecuada a las heridas abiertas que necesitan curarse, puede apaciguar el terror ante la amenaza de aniquilación por la violencia física de las armas o la violencia psíquica del ninguneamiento, puede calmar el dolor producido tanto por las faltas de otros como por las propias, puede dar lugar al reconocimiento de la culpa por los daños infligidos y a la reparación de las relaciones dañadas.

El desarrollo de la conciencia
Palabras como "separación" y "secesión" y las que se derivan de ellas, usados con predilección por los políticos y medios que abogan por la unidad de España, parten del supuesto que hubo un unión que Cataluña pretende romper. Al presentar la voluntad catalana de auto-determinación sin su contexto histórico, se señala al pueblo catalán y al gobierno elegido por él como responsables de la fractura social y económica del estado español. Una mirada más de cerca, sin embargo, que tiene en cuenta el contexto tanto histórico como actual, revela que a partir del momento en el que dejaron de existir las Españas con sus diferentes formas de gobierno, las tierras catalanas con su población fueron anexionadas por el estado centralista. En términos de desarrollo de la conciencia diríamos que fueron engullidas por la conciencia indiferenciada de las masas, típica de regímenes totalitarios. En ningún momento se dio paso alguno para crear una unión entre España y Cataluña, ni siquiera en los inicios del estado democrático que se pretendía construir en 1978, con la pretensión de los gobiernos autónomos llamados "café para todos" que daban a las regiones que no habían conocido ninguna forma de gobierno más que la centralista las mismas competencias que a una nación con una tradición milenaria en la participación ciudadana en el gobierno. El significado de superficie de "separación" y "secesión", de "separatista" y "secesionista", acusa un ataque a la unión, y encubre el significado subyacente que niega la existencia de millones de personas y los ataques perpetrados contra ellos y sus instituciones durante siglos en el intento de imponer las estructuras y la cultura española. No es de extrañar, pues, que tantos catalanes no se sientan pertenecientes a un estado que no los reconoce.

La imperiosidad con la que se defiende la supuesta unidad de una España que incluye Cataluña pone de manifiesto cuan precaria es la sensación de la propia identidad española. En este contexto cabe destacar que hace cuatro días que España ha dado los primeros pasos para emerger de la conciencia de masas propia de las dictaduras. Hace falta tiempo para construir las estructuras que permiten una toma de conciencia de la propia identidad. Para reconocer a otro, es imprescindible tener la capacidad de conocerse a uno mismo, cosa que empieza a ser posible a partir de cierta edad. En estos días tanto España como Cataluña tienen la oportunidad de verse retratados en sus formas de interactuar.

Dos estilos de comunicación
Básicamente, Dr. Langs identifica dos estilos de comunicación: la recepción y emisión de verdades por una parte y, por otra, la recepción y emisión de mentiras. Ambos cumplen una función adaptativa, pero para un intercambio significativo real es indispensable que lo recibido y emitido sea verdad.

Una persona que reconoce un estímulo perturbador y lo procesa y se adapta de un modo significativo, se ocupa del origen interactivo e intrapsíquico de un problema emocional, y responde sin evitarlo ni falsificarlo. Es emisora de verdad. Una persona abierta hacia los significados válidos en los mensajes de otros es capaz de procesar de forma consciente los significados más importantes de los mensajes recibidos y de responder con su propio mensaje codificado que claramente se deriva de las implicaciones del mensaje recibido. Es receptora de verdad.

Una persona que no responde a un estímulo importante, ni procede a generar una respuesta derivada significativa, destruye un elemento de la red comunicativa, o varios. Es emisora de mentiras o de barreras de mentira. Los emisores de mentira desean no vérselas con estímulos perturbadores. Se cierran en banda ante el impacto de lo que no quieren ver y desatienden los significados e implicaciones que se derivan de ello. Generalmente sin tener conciencia de ello, niegan la verdad de un estorbo generado, es decir que crean un sistema de barreras de mentiras, o sustituyen la verdad por mentiras o ficciones. Los receptores de mentiras borran y destruyen los significados de los mensajes entrantes. No muestran ninguna señal directa de comprensión, ni producen elaboraciones codificadas de las implicaciones de los mensajes recibidos. Mantienen una actitud de no-significado en ambos niveles.

Un tipo común de emisor de mentiras es el creador de clichés. Los clichés son una formación de barrera de mentira extremadamente corriente. Los creadores de clichés inteligentes les dan la apariencia de expresiones sustanciales, aunque un examen un poco más de cerca revela una ausencia esencial de significado dinámico y vital. Veamos, por ejemplo,  las continuas alusiones al estado de derecho y la constitucionalidad de parte del gobierno español en el conflicto hispano-catalán, repetidas por los líderes de la oposición y por los principales miembros de la comunidad europea. En sí, el estado de derecho y la constitucionalidad, sin duda, representan valores fundamentales que todos deberían respetar. Pero si se erige como defensor alguien que de forma continuada tergiversa, tuerce e infringe los valores representados por esas palabras y abusa de ellas con fines personales o partidistas, cuanto más las repita, tanto más las va convirtiendo en clichés. Aunque no constituyan mentiras aparentes, su verdadero significado se desgasta con el tiempo y la repetición, hasta perder todo validez. Aun así, con frecuencia son aceptados por el receptor del mensaje porque las palabras tienen una cualidad reconfortante, por huecas que suenen. El significado pretendido es bien recibido como formación de una barrera de mentira que desvía hacia un lado el impacto imperioso de verdades perturbadoras subyacentes.

¿Cuál podría ser, pues, la verdad subyacente cuyo impacto perturbador el estado español y los principales miembros de la comunidad europea necesitan desviar?

Los residuos del trauma y de la culpa inconsciente en el cuerpo
Para el pueblo catalán el ataque del estado español contra su identidad cultural y la forma ancestral de participación ciudadana en el gobierno constituye un estímulo perturbador. Durante centenares de años se ha dedicado a procesarlo y adaptarse de un modo significativo.  Se ocupa del origen interactivo e intrapsíquico del problema emocional que esa situación supone y responde sin evitarlo ni falsificarlo. Recibe el significado de los mensajes del estado español y de la comunidad europea y se hace a la idea de que poca comprensión puede esperar de España y de la comunidad europea, a no ser que logre esforzarse aún más para comunicar la realidad de la vida en Cataluña de un modo que despierte la atención de Europa e, idealmente, España. Una parte sustancial de la población catalana ha aprendido a procesar de forma consciente los significados más importantes de los mensajes que recibe desde dentro y fuera y a responder con sus propios mensajes codificados claramente derivados de las implicaciones del mensaje recibido. En todo momento, de forma inagotable, sigue la intención de comunicar para llegar a una solución aceptable para todas las partes.

A lo largo de siglos, el gobierno español responde con negativas a la reivindicación catalana de ser reconocido como pueblo con una cultura y una forma de gobierno distintas de las del pueblo español. Más allá de la represión, ataques violentos e insultos, de momento, el estado español no ha generado ninguna respuesta significativa y, así, va destruyendo más y más elementos de la red comunicativa. Desea no saber nada de la reivindicación catalana, ya que la considera perturbadora. Pero en vez de procesar la perturbación y adaptarse de un modo significativo, se cierra en banda ante su impacto. Desatiende los significados e implicaciones que se derivan de la reivindicación. Niega que sean verdad, crea un sistema de barreras de mentiras y sustituye la realidad de la actualidad catalana por mentiras y ficciones. Borra y destruye los significados de los mensajes que el pueblo catalán dirige hacia el estado español tanto directamente como a través del gobierno que eligió. No muestra ninguna señal directa de comprensión, ni produce elaboraciones codificadas de las implicaciones de los mensajes recibidos. Se mantiene en una actitud de no reconocer ningún significado. Ni reconoce como legítima la reivindicación catalana de auto-determinación,  ni reconoce la violencia ni la injusticia de su propia reacción.

Si las mentiras son conscientes e intencionadas, significaría que el gobierno español es una banda criminal. ¿Es posible que toda la comunidad internacional sea cómplice? Hay quienes creen que efectivamente es así. A esta analista de patrones de conducta, sin embargo, le parece que las barreras de mentiras y los clichés que predominan en la actitud española e internacional hacia la intención de millones de catalanes, se deben a síntomas desatendidos de estrés postraumático y culpa inconsciente en el contexto de las guerras y dictaduras del siglo XX, adquiridos a través de la propia experiencia o del contacto con padres y abuelos (incluyendo madres y abuelas) traumatizados.

El trabajo interno para resolver los registros traumáticos no es fácil. Normalmente se embarcan en ello solo aquellos que no tienen más remedio, cuando ya no son más capaces de mantener las posturas de negación y su mundo se les viene abajo. Algunos afortunados se dan cuenta antes y lo emprenden de forma deliberada. Para las víctimas, tal vez, de entrada, la necesidad de llevar a cabo ese trabajo es más apremiante y también más prometedora, porque el camino deja vislumbrar una posibilidad de salir de la impotencia  frente a un opresor violento. Para los perpetradores de injusticias y violencias suele ser más difícil, ya que, aparte del terror y dolor de la experiencia en sí, conlleva tener que reconocer que uno mismo, o una persona amada y próxima, o un colectivo al que uno pertenece, ha cometido injusticias y atrocidades vergonzosas.

Una gran parte del pueblo catalán ha hecho ese trabajo interior en alguna medida. Estuvo presente con el dolor, el terror y la rabia producidos por los reiterados ataques a su cultura y su forma de expresarse y gobernarse. Sin hundirse en las emociones, sin dejarse arrastrar por ellas a conductas destructivas, y sin negarlas, ha encontrado una forma significativa de representarlas, por ejemplo, en la celebración anual de los actos conmemorativos el 11 de septiembre, el emplazamiento del parlamento catalán en el edificio que alojó el arsenal de armas de las fuerzas de ocupación española en la base militar construida en una barriada que fue derrocada con el fin de vigilar y dominar la ciudad. La estatua delante del parlamento, “Desconsol”, el desconsuelo, da expresión estética al sentimiento prevaleciente respecto a la pérdida de sus derechos y el trato recibido a lo largo de los siglos. Cansados de la beligerancia y corrupción de los que sustentan un poder usurpado por desacatamiento testamentario primero, el uso de las armas después y la judicialización de la política a través de la manipulación de las instituciones del estado de derecho después, una vez más, el pueblo catalán está gestionando el estrés postraumático, está aprendiendo de sus errores y va recuperando las fuerzas suficientes como para manifestar su existencia y darla a conocer al mundo entero.



Para las personas y los colectivos cuya identidad está atrapada en los mecanismos de defensa contra los registros traumáticos y las culpas inconscientes, resulta amenazante reconocer la legitimidad de las reivindicaciones catalanas porque implicaría tener que admitir los rastros de traumas y culpas inconscientes que amenazan en su propio interior. ¿Tenemos que pasar por otra ciega reiteración de las dinámicas de una confrontación violenta? Es debido a la ciega repetición de las dinámicas generadas por los registros traumáticos en los cuerpos de cada individuo que la ultraderecha vuelve a aumentar el número de sus adeptos en todas partes. ¿Tenemos que esperar hasta que el mundo entero se venga abajo en una crisis generada por los traumas no resueltos y las culpas negadas y genere traumas y culpas todavía mayores, antes de ponernos a atender sus síntomas? En vez de esperar a que ya no haya otra opción, podríamos poner manos a la obra. Un buen primer paso podría ser dejar de considerar el conflicto hispano-catalán un asunto interior de España y reconocerlo como un asunto que nos concierne a cada uno individualmente y a todos como colectivo humano.

La lucha con la verdad y la mentira forma parte de la naturaleza humana
Dr. Robert Langs nos advierte de la importancia de reconocer que la lucha con la verdad y la mentira, consciente e inconsciente, forma parte de la naturaleza humana. El que comunica mentiras debería tener nuestra compasión y comprensión, afirma, y el que dice la verdad, nuestra más profunda admiración.

En todo caso, el cuerpo no miente. En el discurso de la señora Soraya Sáenz de Santamaría en el senado el día 26 de octubre 2017, se vislumbró lo que podría ser un indicio esperanzador de que, al menos su cuerpo, esté empezando a reconocer la insostenibilidad de la actitud del estado español: en varios momentos estuvo a punto de perder la voz.

Al escuchar el sonido de la voz de la gente se puede oír si realmente creen lo que dicen. Algunas personas están convencidas de decir la verdad, externamente, pero solo una parte de su cuerpo participa en el acto de dar expresión a lo que dicen, mientras otras partes, a menudo de mucha más envergadura, permanecen quietas. Entonces la voz suena impostada, falsa, sarcástica, dubitativa, burlona, hueca, estridente, forzada, paternalista, despreciativa... en la parte frontal superior del cuerpo, con un bloque oscuro inmóvil detrás. A esta observadora internacional del conflicto hispano-catalán las voces que justifican la aplicación del artículo 155, en el mejor de los casos, implican un 30% del cuerpo de los señores Rajoy, Méndez de Vigo, Maza, Rivera, Arrimadas, etc., en el acto de hablar. Lo que el 70% restante oculta puede, en realidad, resultar bastante inofensivo. Es la intensidad de las defensas contra eso que se esfuerzan por mantener apartado de su conciencia -y la nuestra- que puede convertirlo en algo realmente aterrador. Para descubrir en qué medida ese 70% representa una agenda ocultada de forma intencional y en qué medida es inconsciente, tendrían que estar dispuestos a establecer una relación veraz con ellos mismos y con los demás.

4 de noviembre 2017

Langs, Robert, Unconscious Communication in Everyday Life, Jason Aronson Inc., Northvale, 1993

Brigitte Hansmann
   Análisis de Patrones Arquetípicos
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Una herramienta potente para facilitar la relación entre el cuerpo y su entorno

sábado, 4 de noviembre de 2017

Unión e independencia



 
¿Cómo es posible que personas que se esfuerzan por crear paz y unión, hagan lo que puedan para dar apoyo a la independencia de un país? ¿No se trata de unir en lugar de separar? Para alguien que no conoce, o conoce solo superficialmente, la historia catalana, el pueblo catalán y el presente catalán dentro de España, ciertamente es difícil de comprender. Tratar esta cuestión en profundidad en un marco de espacio limitado es imposible. Pero una comparación puede clarificar el asunto.

Imaginaos un matrimonio entre un hombre católico y una mujer católica, o sea, un enlace sagrado indisoluble entre dos personas. En el momento de casarse, todo el patrimonio de la mujer pasa a manos del hombre. Al cabo de unos años, él le niega el derecho de decidir sobre sus asuntos: Eres mía y todo eso sobre lo que quieres decidir también es mío. No tienes nada que decir al respecto. De tus abuelos, tu padre y tu hermano mayor no hace falta que esperes ayuda, ya los he matado. Y como sigas quejándote, mataré también a tu madre y los hermanos y hermanas que te quedan.

Pasan los años y, cuando la madre ya murió, la mujer quiere el divorcio. Sus hermanos y hermanas la apoyan en su intención. El hombre no quiere saber nada de esto; interviene sus cuentas bancarias, la derrenga a golpes, la calumnia y la encarcela. A los compañeros de su peña de tertulias su actitud les resulta incómoda, pero hablan de nada más que de la indisolubilidad del sacramento del matrimonio y de que las dificultades deberían resolverse en la vida privada de la pareja. Pero un día a uno de los contertulianos se le escapa lo que les preocupa realmente: si se reconoce la legitimidad de la demanda de la señora posiblemente las esposas de otros contertulianos también querrán seguir el ejemplo de ella.

Legitimidad no tiene ni pizca la reivindicación de España sobre Cataluña. La anulación de un enlace que existe bajo las condiciones mencionadas no debería ser más que una formalidad. La principal dificultad reside en el hecho de que España niega el factor diferencial de Cataluña, a la vez que se siente amenazado precisamente por esa diferencia. Los catalanes tienen una cultura muy diferente de la española. Esto salta a la vista de cualquiera que se tome el tiempo de mirar aunque sea solo un poco. El principio al que los catalanes siguen es “hablando la gente se entiende”. Esto quiere decir que también saben escuchar para saber con quiénes están tratando y qué les importa a los otros. Tal vez llegaron a desarrollar el arte de negociar porque España les prohibió participar en la conquista de América que dejó casi la península ibérica entera desforestada con tantos barcos que se construyeron para buscar “El Dorado”, la ciudad de oro a ultramar. Muchos suelos fértiles se perdieron debido a la erosión provocada por la falta de bosques, y la tierra sufre una fuerte tendencia a la desertificación. Los incendios provocados para recalificar tierras para la construcción hacen otro tanto en nuestra época. 

Los intentos continuados a lo largo de los siglos de suprimir la cultura catalana e imponer la española califican la reivindicación española sobre Cataluña como la de un conquistador sobre una colonia. De hecho, Cataluña nunca llegó a ser una parte de España, ni siquiera desde el punto de vista español. Sólo hace falta ver lo que los propios españoles han ido diciendo sobre los catalanes a lo largo de los siglos. Siempre se les ha visto como diferentes y siempre como una amenaza. Pero lo que es amenazante en los catalanes, es la culpa inconsciente de quien los maltrata, que no tolera verla y, por esto, la niega y la proyecta sobre las personas maltratadas.

Desde el punto de vista de esta autonombrada observadora internacional del conflicto hispano-catalán en ninguna otra parte hay una historia tan acerba y unívoca como aquí. Puede que esto se deba a mi ignorancia. Pero mi propuesta para los señores contertulianos es que aprendan del comportamiento fallido de su compañero. Si uno quiere tener una buena relación con unas personas, lo sensato es conocer las particularidades de estas personas, escucharlos y hacer suyos sus deseos y sus miedos para poder cumplir los deseos en la medida de lo posible y ofrecer protección donde reina el miedo. Pero en el caso de Cataluña, ni esto serviría a estas alturas. La unión entre España y Cataluña fue condenada al fracaso a partir del momento en el que dejaron de existir las Españas, cuando España empezó a suprimir las facultades de autogestión del pueblo catalán y a imponer a la fuerza el orden centralista que caracteriza el gobierno español. 

Una característica del pueblo catalán es su capacidad de integrar a personas que son diferentes en la población general. Los españoles que viven en Cataluña, por esto, no tienen nada que temer. Además, a esta observadora internacional autonombrada le parece que nadie quiere poner fronteras, sino simplemente delimitar las competencias que tocan a cada uno en su propio territorio. Una buena relación entre España y Cataluña podrá crearse, en cuanto España reconozca la soberanía catalana.

Negar la forma de ser diferente de una persona o de un pueblo es violencia, ya sea a través de armas o a través de leyes y constituciones. Las leyes y las constituciones existen para regular la convivencia en la sociedad y para asegurar el respeto y la igualdad de derechos en los tratos mutuos entre los miembros de la comunidad. Las leyes que son contrarias a esta finalidad, a la larga, no son sostenibles porque, en vez de regular la convivencia, fomentan el hundimiento de la comunidad en su totalidad.

La única solución arquetípicamente coherente del conflicto hispano-catalán es el reconocimiento de la soberanía catalana. Aunque le cueste al gobierno español, le será posible saldar la culpa del maltratador solo si emprende pasos para reparar la relación dañada. Solo de esta manera podrá la sociedad española reorganizarse para participar juntos con una población catalana soberana en las aportaciones necesarias para mantener la comunidad europea. Pero si se continúa negando la culpa del gobierno español, esta seguirá poniéndose de manifiesto a través de actos fallidos, bancarrotas, fracasos y falta de éxitos, muy probablemente no solo en España y Cataluña sino en el conjunto de la peña europea. Eliminar la existencia de esta culpa no es posible, ni siquiera si España lograra enterrar hasta el último catalán, cosa que es poco probable. Hay un dicho catalán según el cual cada catalán que se pone bajo tierra se convierte en un puñado de semillas. Y de cada una de esas semillas crecerá otro catalán. 

Para una persona que hace lo que puede para crear paz y unión en la humanidad prácticamente es indispensable dar apoyo al intento catalán de lograr la autodeterminación, porque la paz y la unión son imposibles, si se fuerza un pueblo contra su voluntad a participar de un estado, especialmente si ese estado se burla del estado de derecho como la hace el gobierno español actual. Como nación soberana con toda seguridad Cataluña hará una aportación valiosa a la convivencia pacífica de todos los pueblos y a la unión de la humanidad. Los únicos que se sienten amenazados por esto son aquellos que hasta ahora, de forma impune, han ido llenando sus bolsillos con los bienes que pertenecen a la comunidad.

19 de octubre 2017

Brigitte Hansmann
   
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viernes, 3 de noviembre de 2017

El rei que no trobava repòs – Un conte de fades

Hi havia una vegada un rei que estava molt trist perquè no tenia descendència directa. Estava malalt i sabia que no li quedava gaire temps de vida. S'adonava que la seva mala salut era el resultat dels pecats dels seus avantpassats, tot i que tampoc no es podia descartar que l'ànsia de poder dels seus coetanis hi tingués alguna cosa a veure. El rei vivia amb un gran neguit. D'una banda, la despesa militar dels seus antecessors havia empobrit la població dels regnes que estaven sota el seu domini. Ell havia intentat alleujar la càrrega tributària dels seus súbdits mitjançant una reducció dràstica de la despesa militar i, així, havia aconseguit que la gent senzilla, a poc a poc, pogués viure millor. Però la seva posició com a monarca no era gaire forta. Molts nobles i alts càrrecs militars no el podien veure ni en pintura, perquè no volien perdre els privilegis de què havien gaudit fins aleshores. Ans al contrari, en volien acumular més.

Els pobles que formaven el seu regne eren molt diferents. Els habitants de Nogara sempre maldaven per contribuir al govern i a la gestió de la vida pública. Eren molt perseverants. Un cop s'havien proposat una cosa, no hi havia res que els pogués fer desviar del rumb que s'havien fixat. Tots seguien un principi que deia: "Parlant s'entén la gent, perquè saber parlar també vol dir saber escoltar". I per això aquest país tenia institucions en què els ciutadans podien parlar entre ells i participar directament en el govern de la nació. El rei era molt més partidari d'aquesta mena de govern compartit que no pas del poder centralitzat que es veia obligat a exercir a Sticalla.

Perquè els habitants d'Sticalla es decantaven més per deixar en mans del poder central, o sigui, la monarquia i l’aristocràcia, la gestió dels afers propis i del conjunt del regne. Els nobles d'aquest regne eren molt afeccionats a la guerra. Molts d'ells eren aventurers que sempre buscaven pobles per conquerir i després sotmetre'ls i espoliar-ne les riqueses, de la mateixa manera que espoliaven el fruit del treball dels seus propis súbdits.

El rei temia que els guerrers i els aventurers d'Sticalla es llancessin sobre els habitants de Nogara segons qui ell triés com a successor. A la línia successòria hi havia dos candidats, però el rei no veia clar que cap dels dos fos realment capaç de governar els dos països d'una manera justa i adient als trets i les capacitats particulars dels ciutadans de cadascun. Per a uns era necessari participar en el govern per tal de fer florir al màxim l'economia i la cultura del seu país. Els altres, però, no se'n sortien sense la direcció del poder central.

Aleshores un dels dos candidats va morir en un accident que mai no es va acabar d'esclarir. L'altre candidat era el net del centralisme personificat. Amb ell no es podia esperar que la ciutadania pogués participar en el govern. I precisament aquest va ser el qui va acabar sent l'hereu. El rei estava convençut que el seu successor sotmetria de seguida Nogara al poder centralista, perquè seguia la mentalitat del seu avi al peu de la lletra. Per tal d'evitar-ho, el rei va fer un testament on disposava que el successor hauria de respectar en tot moment les diferents formes de govern dels països del regne. La seva única esperança era que el successor n'aprengués amb la pràctica i que, amb el temps, sabés estar a l'alçada de les diverses demandes i necessitats que li caldria gestionar. Per això, d'entrada, el volia posar a prova d'una manera que li fes conèixer els diferents tarannàs dels pobles del regne i que aprengués a respectar-los i a apreciar-los tal com eren.

Tanmateix, abans de poder donar a conèixer la prova a la qual el volia sotmetre, el rei es va morir tot de sobte. No seria d'estranyar que algú s'hagués encarregat d'enviar-lo a l'altre món. I aleshores va passar el que ell tant temia: es varen instaurar la guerra i el despotisme. Durant segles. I no només als països del seu regne, que es varen veure forçats a agrupar-se en una "gran pàtria" anomenada Neinpas, sinó a tot arreu.

El rei jeia ara a la tomba i no trobava repòs. No parava de donar voltes i de senyar-se: "Déu meu! Això no hi ha qui s'ho cregui!" Com el recordaria la posteritat ja li era de tot igual, però estava d'allò més amoïnat pel destí que li esperava al seu poble.  "Com se li pot explicar a aquesta gent que la riquesa d'un regne prové de la diversitat dels seus pobles? Només cal donar-los espai perquè puguin florir. Així no anirà bé la cosa! Jo no puc jaure tranquil a la tomba si no arriben a entendre un principi tan fonamental com aquest! La cobdícia i la set de poder d'aquesta gent és que no té nom! Què hi podria fer jo...? Què hi podria fer jo...?". Els cortesans del successor varen fer posar lloses i rocs damunt la tomba. Però les lloses es trencaren i els rocs rodolaren cap als costats, perquè el rei difunt no parava de remenar-se dins la tomba i no trobava repòs.

Encara que el seu cos sense vida ja no tenia veu, els seus laments arribaren a oïdes d'una força que posseïa la facultat d'adoptar qualsevol forma que li convingués per tal d'ajudar aquells que li pregaven que els alliberés del seu patiment. Si l'atribolat rei, quan encara vivia, hagués adreçat els seus pensaments a la força de Percebre els Sons del Món, ella hauria acudit a fer-li costat de seguida. Però el rei no feia més que pensar en què podria fer. Mai no se li va acudir que Percebre els Sons del Món el podria ajudar a trobar una solució pràctica.

Percebre els Sons del Món és una força que ajuda de seguida tots aquells que s'hi adrecen. Així que algú li envia els seus pensaments, ella corre a ajudar-los i fer-los costat allà on calgui. La seva empatia i compassió, la seva força i capacitat, no coneixen fronteres.

Malgrat totes les adversitats i entrebancs al llarg dels segles, la intenció del poble de Nogara de restaurar un sistema de govern que comptés amb la participació del poble era inesgotable. Intenció Inesgotable ajuda tothom que li dona la seva confiança. Sap com n'és d'important Percebre els Sons del Món per dur a terme qualsevol empresa i, molt especialment, en èpoques de perill i situacions d'amenaça. Però com s'ho fa Percebre els Sons del Món per ajudar aquells que se li adrecen? Quan algú es troba en un destret, només cal que pensi en la força de Percebre els Sons del Món perquè el camí de sortida se li aparegui sens falta. Intenció Inesgotable sap apreciar la força de Percebre els Sons del Món i, ple de joia, li dedica els seus béns més preats. Al seu torn, Percebre els Sons del Món els posa de seguida a disposició del reconeixement absolut de la preciosa diversitat de totes les formes de vida.

Des de temps immemorials, Intenció Inesgotable  ha acompanyat sempre tots aquells que estan disposats a resoldre els conflictes a través del diàleg. Una vegada, almenys durant uns anys, fins i tot a Neinpas, és a dir, als països de Nogara  i Sticalla unificats per la força de les armes, aconseguiren mantenir una forma de govern que descansava íntegrament sobre la voluntat del poble, per al bé col·lectiu de tots. A la tomba del rei que fins ara no havia trobat repòs, la cosa es va calmar durant aquests anys. Fins i tot hi varen créixer flors. Però als guerres i als aventurers, aquest estat de coses no els agradava gens, encara que fins i tot a ells els anés millor d'aquesta manera. Però ai, renunciar als seus privilegis... Ah, no, això sí que no! I es tornaren a embrancar amb la guerra. De diàleg, no en volien saber res, amb ningú. Això voldria dir que haurien d'escoltar les veus dels altres. Ah, no, fins aquí hem arribat! En tot cas, només escoltarien la seva pròpia veu, i fins i tot això de vegades els semblava massa exigència. Si es quedaven prou callats per arribar a escoltar res del que els deien, a dintre començaven a sentir el rebombori de tot allò que havien reprimit durant tant temps. Això era massa. No ho podien tolerar.

Aleshores, al voltant del regne començaren a aparèixer comunitats de nacions en les quals Neinpas també volia participar. I amb això de participar-hi, tothom hi estava d'acord. Ara, als espadatxins no els quedaria més remei que aprendre a dialogar amb els altres. Però aprendre les llengües de les altres nacions se'ls feia molt costa amunt. I saber escoltar... Això sí que se'ls feia impensable, encara que els ho expliquessin en la seva pròpia llengua. I sobretot si venia de la conciliadora Nogara.

Per al poder central de Neinpas, admetre qualsevol mena de culpa, ni que fos en el seu fur intern, significava una pèrdua de prestigi que no es podien permetre de cap de les maneres. Però tanmateix, cada individu humà, sense excepció, pertany a la preciosa diversitat de totes les formes de vida i, per això, no pot ocultar la seva culpa, per molt que provi de justificar-se o d'amagar-se darrere la legalitat d’unes lleis creades per a res més que aquesta finalitat. Però les lleis que van contra les regles de la convivència pacífica dels pobles, a fi de comptes, no fan més que perjudicar tothom. Fins i tot quan hom no se n'adona, tard o d'hora farà coses que revelaran aquesta culpa a tothom, tret, potser, del mateix culpable.

Com va passar, per exemple, quan un vaixell petrolier amb l'infaust nom de Prestige va naufragar prop de les costes de Neinpas, uns segles després que morís el rei amoïnat. El govern central d'aquell moment, en comptes de posar en marxa tots els sistemes disponibles per reduir al mínim els danys, es va estimar més treure'l de les aigües territorials i portar-lo mar endins, on es va desfer en mil bocins. Els danys provocats, en tots els sentits, varen ser enormement pitjors. La pèrdua de prestigi de Neinpas provocat pel desastre del Prestige era ara d'allò més evident per a qualsevol que ho volgués veure.

El petroli s’ha format a partir de les restes mortals dels avantpassats de totes les formes de vida actuals. Des de fa molt temps, les qüestions territorials i la pertinença a un país o un altre han estat molt determinades per la voluntat d'assegurar-se l'accés a aquestes restes mortals dels avantpassats, i no precisament per honorar-los com es mereixen, sinó per aconseguir més poder i enriquir-se a costa dels altres. Això encaixava perfectament amb la tradició immemorial de Neinpas d'obtenir riqueses per la força de les armes.

Però, ai las, aquesta diversitat de relacions i connexions de la població de Nogara, que volien parlar per entendre's entre ells i amb els altres, ajudar-se mútuament, sempre junts amb Intenció Inesgotable, era un corcó intolerable per al govern centralista. Els seus ministres ho vivien com una amenaça. I justament perquè a sota del llindar de la seva consciència hi havia la culpa dels seus avantpassats i de la seva pròpia, eren incapaços de parlar amb els altres d'una manera franca i oberta. Per molt que s'acollissin a la legalitat de les seves demandes, al final cadascun d'ells estava tot sol i aïllat en si mateix.

I aleshores va arribar el moment de la gent, del poble que s'havia anat preparant, dia a dia, any rere any, amb l'ajut d'Intenció Inesgotable, per fer-se càrrec directament de la gestió dels seus afers. Però primer volien demanar-li a Percebre els Sons del Món que els donés suport en les seves aspiracions. No volien emprendre res que no estigués en consonància amb aquesta força.

El govern central no volia permetre de cap de les maneres que Percebre els Sons del Món entrés en el joc. Però això era gairebé tan poc realista com voler buidar el mar d'aigua amb un got.

Si el rei va arribar a trobar mai el repòs, no ho sap ningú. Caldrà veure com acaba la cosa. La narradora confia en la Intenció Inesgotable del poble de Nogara, dedica la seva atenció plena a Percebre els Sons del Món i malda per mantenir-se profundament vinculada al reconeixement absolut de la preciosa diversitat de totes les formes de vida.

I si no s'han mort és que encara són vius.

Això és un conte. Qualsevol semblança amb persones o fets reals és intencionada. Com la majoria de contes, aquest també es basa en la transmissió narrativa de patrons arquetípics i no pretén ser una representació acurada de cap mena de fets. 

11 de setembre del 2017

Brigitte Hansmann
   Anàlisi de Patrons Arquetípics
   DFA Reconeixement de Patrons Somàtics
   www.dfa-europa.com

Traducció de l'alemany: Matias Mulet i Brigitte Hansmann

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